No eres la primera persona, ni serás la última que se enfrenta con tiempos difíciles; pero no tienes que afrontarlos solo (a), habla con El y espera su respuesta... “Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme; has entendido desde lejos mis pensamientos” (Salmos 139).

Quien te podrá entender mejor que tu creador?
Ni tu madre, ni tu padre o tu esposo, mucho menos tus hijos podrán comprender el proceso por el cual estás pasando. Unicamente El sabe todo de tu vida: lo pasado, presente y futuro.

Hoy en dia hay demasiados atentados al bienestar nuestro. Lo que causa más daño a cada persona son sus propios pensamientos, y si no paramos a tiempo esos pensamientos pueden causar gran daño, no sólo a quienes le llegan, sino a quienes les rodean. Cuantos de nosotros afrontamos a diario pensamientos contrarios a nuestra fe o nuestros valores. Valores que se han ido perdiendo por no saber frenar los malos pensamientos de los cuales todos hemos sido victimas.

Como seres creados por Dios, todo ser humano tiene un enemigo que no descanza ni de día, ni de noche; para hacer caer a cualquiera, y si no estamos bajo la cobertura especial que Dios nos dá somos presa fácil.

Las dificultades que todo ser humano enfrenta, son causantes de desequilibrio en todo sentido: si es económica, afecta no sólo las finanzas, si no tambien las relaciones interpersonales y casi siempre quienes sufren son aquellos quienes son el prójimo cercano: tu pareja, tus hijos, tus padres, hermanos; dependiendo de quienes forman el núcleo familiar cercano. La economía es un tema bien extenso y podríamos enumerar muchos factores, pero nos centraremos en la administración de las finanzas.

Ese es el indicio por el cual nuestro enemigo llega a poner pensamientos malvados en la mente de cualquier persona, la mente es muy poderosa y si no la cuidamos podemos llegar a caer en un estado de depresión y depresión profunda si no se tiene el cuidado necesario.

Me tocó a mi vivir la experiencia de saber e intervenir con alguien que amenazó con quitarse la vida por no haber podido llevar un control ordenado de sus gastos, y no la cuplo la responsabilidad era grande; ella veía la necesidad de sus hijos y no podía satisfacerla. Pensaba que morir era el único camino para que sus pequeños cobraran el seguro de vida y así satisfacer sus necesidades. Hoy en día esa persona le sirve con amor a Dios desde hace algunos años, siendo madre soltera ha sacado adelante a sus hijos, y ya tiene la primera profesional exitosa dentro de ellos, quién también le sirve al Señor con alegría. Gloria a Dios por eso!! Eso sirve de motivación a todo el que crea que no se puede; sin embargo con esfuerzo, valentía y de la mano de Dios podemos llegar muy lejos.

Alguien probablemente podría decir: “es fácil sentarse a escribir pasajes Bíblicos y decir busca de Dios porque su palabra dice que El es bueno, cuando en realidad no sabe como me siento, porque lo que yo estoy pasando no se compara”. El dolor que tú sientes nadie más lo puede sentir de igual manera que aquel quien te creó, ni siquiera tu madre o tu padre, mucho menos tu pareja, o tus hijos; son capaces de conocerte de esa manera. Solo Dios sabe, porque a El también le duele tanto o más de lo que te duele a tí. El es nuestro Padre y sólo quiere darnos lo mejor y me toca a mí testificar de ello, ya que muchas han sido mis aflicciones y de todas me ha sacado adelante Jehová. Me he aferrado a El, porque es mi roca de salvación, mi escudo, mi fortaleza, mi torre fuerte. El es mi TODO.

El me buscó por mucho tiempo. Esperó pacientemente a que yo me rindiera a El y a que yo le sirviera y lo amara con todo mi corazón, reconociendo que El ES DIOS. Esta fué mi petición a El por algún tiempo: “Quiero enamorarme de Jesucristo”, y El hizo la obra en mi. Me ha ido guiando por el camino hasta donde estoy ahora. Le amo porque El es Dios y me ha bendecido grandemente por amarle sin interés. No se cual sea mi fururo, pero con toda seguridad se que lo que está por venir es aún tan maravilloso, mucho más de lo que hasta hoy Dios me ha ministrado; tanto que soy incapaz de escribir y me limito a invitarte a meditar en la palabra maravillosa de nuestro creador, quien no cambia, El es el mismo de ayer y de siempre: Jehova, El Gran Yo Soy, mi Dios.
Salmo 139 (estos son sólo algunos versículos, te reto a buscar y leer el salmo completo y se que como yo te gozaras y lo harás tuyo)

Oh Jehová, tú me has examinado y conocido.
Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme;
Has entendido desde lejos mis pensamientos.
Has escudriñado mi andar y mi reposo,
Y todos mis caminos te son conocidos.

Pues aún no está la palabra en mi lengua,
Y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda.
Detrás y delante me rodeaste,
y sobre mí pusiste tu mano
Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí;
Alto es, no lo puedo comprender…

Por más que das vuelta a tus pensamientos y no logras encontrar la salida, solo extiende tu mano y acepta su protección. No esperes más! Y si quieres compartir tu testimonio, tambien puedes escribir y si solo deseas oración, indica únicamente oración.