La vida es demasiado corta y está llena de momentos bellos, por lo que debemos aprovechar cada día para ser felices y hacer felices a quienes nos rodean, siempre que dependa de nosotros!
Así como existen las diferentes estaciones que marcan el tiempo del año que estamos viviendo, así también a lo largo de nuestra vida hay circunstancias que marcan una etapa en cada año que se nos permite vivir.
Para que nuestro cuerpo se formara en el vientre de nuestra madre hubo una organización perfeta entre todos los organismos que intervienen a fín de que un cuerpo humano se forme. Así mismo es con los animales según su especie, todo coordinado por el creador de todo lo que en el mundo hay.
Una vez que el recién nacido sale del vientre de su madre, si se le permite vivir fuera del vientre que lo protegió por un tiempo, recibirá el soplo de vida; Para vivir no su propia vida, porque no le pertenece, sino la vida agradable para aquel que procuró su formación, nacimiento y además le dió un aliento de vida.
Como seres humanos tenemos diferentes etapas en nuestra vida hasta llegar a la edad de madurez, y desde que nacemos se nos permite tomar acciones a cerca de lo que queremos o necesitamos. El bebe llora porque tiene hambre, frio o calor. Según va creciendo, cada cual escoge la forma de llamar la atención: unos se irritan y les cambia el caracter, quienes les conocen bien, sabrán que algo les molesta y esa es la forma que han elegido para dejar saber su necesidad fisiológica o su mal estar.
Durante la etapa de crecimiento, toda criatura recibe el cuidado necesario para desarrollarse a fin de incorporarse, adaptarse y ser parte de su entorno; hasta llegar a la etapa de la conciencia e identificarse a sí misma y reconocer que es un ser individual con capacidad de raciocinio, a quien se le ha dado la facultad de elegir entre una u otra cosa. A medida del crecimiento, cada cual toma sus propias decisiones, que a su vez conllevan consecuencias.
Desde el momento que somos conscientes de nuestros actos, algunas de esas etapas podrían ser no muy agradables, inesperadas y hasta cierto punto pueden ser causantes de desequilibrio emocional, pero la Bíblia nos enseña que debemos ser agradecidos y dar gracias a Dios en todo tiempo. Cuándo damos gracias por las “etapas” situaciones que nos causan desequilibrios; experimentamos una paz interior en medio de toda situación y eso nos impulsa a seguir adelante sin derrumbarnos, nos ayuda a mantener la esperanza y la seguridad de que pronto pasará. Cuándo la tormenta haya pasado podremos decir: Dios ha sido Bueno, hasta aquí nos ha ayudado.
por lo tanto
La única salida exitosa para no dejarte vencer es reconocer que no hay nada que puedas hacer para evitar “la estación” que estás enfrentando, por lo tanto; lo mejor es buscar un refugio seguro para resguardarte hasta que lo peor del clima haya pasado, “Jehová es la fortaleza de su pueblo, y el refugio salvador de su ungido” Salmos 28:8
Salmos 28:7 “Jehová es fortaleza y mi escudo; en el confió mi corazón, y fui ayudado, por lo que se gozó mi corazón y con mi cántico le alabaré”.
La vida es demasiado corta y está llena de momentos bellos, por lo que debemos aprovechar cada día para ser felices y hacer felices a quienes nos rodean, siempre que dependa de nosotros. Hay que tener en cuenta que no siempre el resultado es el esperado, y cuando eso suceda debemos recordar que no somos perfectos, por lo tanto, hay que perdonarnos a nosotros mismos y perdonar a los demás. Procura no guardar el enojo, deja que otros se enojen, ora por ellos; pero tú elige Ser Feliz ! a pesar de las ciircunstancias. Elige cerrar las puertas de la amargura e incomprensión; y por sobre todo espera en Dios, quién sabrá poner todo en orden a su debido tiempo de acuerdo a su perfecta voluntad.
Hay que tomar en cuenta que así como la primavera es hermosa porque nos rodea la naturaleza con sus hermosos follajes de colores, los verdes pastos y el clima perfecto para salir de paseo; así también hay quienes no podrán gozar de libertad para disfrutar de todo eso, ya que la estación en sí les causa alergias severas; y más bien querran resguardarse de esa estación. Eso no quiere decir que La Primavera sea mala o que podamos evitar que llegue, sino más bien, debemos aprender a tomar alternativas que nos ayuden en el trayecto de dicha estación.
De esa misma manera debemos actuar cuando enfrentamos tiempos difíciles y siempre que sea necesario debemos hacer cambios que nos ayuden a enfrentar cada “estación de nuestra vida” con valentia, y la certeza de que no estamos solos y que hay alguien que siempre ha cuidado de nosotros; aún desde antes que nuestro embrión fuere formado en el vientre de nuestra madre, porque somos sus criaturas y nuestra vida le pertenece a El. “De Jehová es la tierra y su plenitud, el mundo y los que en el habitan” Salmos 24:1. Por sobre todo elige ser Feliz, no importa la circunstancia que marca la estación que estás enfrentando en este momento. Confía en Dios, espera en El y en su debido momento El hará y te mostrará cual sea su perfecta voluntad para tu vida.
