12 Confia en mi

Dios quiere tener una relación fuerte y estrecha con nosotros.
Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Proverbios 3:15

 

Cómo vamos a confiar en alguien a quién no conocemos, o conocemos poco y aún no tenemos una relación cercana.
La confianza es un alto nivel de seguridad a cerca de una persona, causa o circunstancia determinada, que se obtiene de acuerdo con el conocimiento que se tenga del tema en cuestión.
Dios no sólo quiere que confiemos en El, si no que lo hagamos con todo el corazón.
La única razón por la que somos capacez de dar el corazón a alguien es por Amor!


El Amor, motivó a Dios a enviar a su hijo unigénito para que todo aquel que en el cree, no se pierda más tenga vida eterna.
Dios quiere que confiemos en El y le amemos voluntariamente. El nos hizo y nos pudo haber diseñado de tal manera, que nuestros cromosomas tuvieran el amor y confianza como atributo especial. Y si así fuera, en el momento que se reemplazan las celulas viejas o desgastadas por unas nuevas; el amor y la confianza prevaleciera siempre en las nuevas celulas, por el hecho de que el Diseñador por Excelencia, así lo hiciera.

 

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Según www.genome.gov los cromosomas forman parte clave del proceso que asegura que el ADN se copie y distribuya fielmente en la gran mayoría de las divisiones celulares, las cuales se realizan constantemente para producir nuevas células que reemplacen las células viejas y desgastadas.

Nada en el ser humano es constante, siempre estamos sufriendo o experimentando cambios desde el interior de nuestro organismo. Así también llegan a nuestra vida situaciones que nos obligan al cambio.

Todo cambia con el paso del tiempo, menos el Amor de Dios hacia nosotros. A lo largo de nuestra vida, enfrentamos altos y bajos emosionales, así como espirituales; y es en esos momentos en los que necesitamos saber que no estamos solos y que alguien nos sostiene. Y y si estamos decaídos, nos levanta.
No hay mejor forma que esta: sabiendo que todo está fuera de control y que no está en tus manos la solución que esperas, hay alguien que te extiende su mano y te dice: “Confia en mí con todo tu corazón y no te apoyes en tu propio entendimiento”.

 Por eso es importante conocer a Dios y entregarle nuestro corazón. La única manera de poder entregarle tu corazón es enamorándote de Jesucristo, su hijo amado.

Esa fue mi oración por algún tiempo. Le pedí a Dios enamorarme de Jesucristo y luego Dios la contestó, y aunque al principio no me gustó la respuesta; porque Dios me estaba encaminando a mí y a mi familia a un rumbo diferente en el cual había sido instruida; sin embargo acepté el llamado de Dios y hoy en día gozo del privilegio de tener una vida llena de gozo y paz en mi corazón y Soy Feliz! En el caminar con Dios y el servicio a él, han habido muchas circunstancias por las cuales se ha afligido mi alma, pero de todas ellas me ha sacado adelante el Señor Jesús; y ese es el motor que me empuja a compartir contigo estas palabras; con el fín de animarte y decirte: Escucha! No estás solo, abre tu corazón y entrégalo a Jesús. Dios te ama y quiere bendecirte. Ese vacío que tú sientes será llenado únicamente cuando lo aceptes a El y lo hagas compañero de tu vida, en tu caminar diario.

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Cuando logres dar ese paso, entónces podrás confiar en Dios y aunque tu mente y tu corazón te digan que esa situación por la que estás atravesando y que te causa dolor, nunca va a cambiar; la confianza en Dios dirá: "Dios está trabajando y la última respuesta siempre la tiene El".

Y si lo que causa dolor llegó a tu vida y no tiene humanamente remedio, déjame decirte que hasta la muerte tiene sentido cuando le servimos al Señor Jesús. Será El quien sane tus heridas y conforte tu corazón en todo momento y en toda circunstancia.

Aprende a confiar en El y entónces harás tuya la palabra descrita en Romanos 8:28 “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados”.

 

 

Recuerda…
“No temas, cree solamente.”

Marcos 5:36

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